Erosión: qué es y tipos
La erosión es un fenómeno natural de desgaste esencial en el ciclo geológico. Gracias a él, se produce la desintegración de la roca, permitiendo el paso de esta a la categoría de sedimento para su posterior transformación en roca. Además, constituye uno de los métodos por los que la naturaleza logra perfilar los paisajes y contribuye al desarrollo de estructuras sedimentarias.
Estas huellas preservadas en la roca proporcionan valiosa información sobre el ambiente de formación donde se crearon y permiten una confección precisa de la columna estratigráfica. Debido al efecto destructivo que crea en los materiales, este proceso es ampliamente estudiado en las ingenierías y la preservación del patrimonio arquitectónico. En este artículo de GEOenciclopedia puedes conocer qué es la erosión y sus tipos, además del origen y desarrollo de este acontecimiento para entender sus causas, e intuir las consecuencias que su presencia conlleva.
Qué es la erosión
La erosión es un proceso geológico natural de desgaste por el cual la superficie se pule debido a la acción continua de la fricción. Este efecto puede producirse por la actuación de agentes geológicos externos, como el agua, el viento, el hielo o la gravedad, o por el roce de otros cuerpos. Durante su desarrollo se produce un debilitamiento en la cohesión de las litologías, creando zonas más susceptibles de sufrir procesos de meteorización, o en su defecto superficies pulidas más resistentes que aportan información valiosa, tal como ocurre con los espejos de falla.
Determinados elementos pueden modificar la efectividad de los procesos de erosión. Esto permite que este tipo de fenómenos sean más importantes en territorios con escasa cobertura vegetal, donde la roca desnuda puede sufrirlos con mayor intensidad. Sin embargo, la erosión no se produce por la acción del elemento en sí, sino por las partículas de material que arrastra. En el caso de la erosión hídrica, las partículas o elementos que arrastra el cauce golpean contra la roca permitiendo su desgaste por fricción.
Otro dato importante sería la dureza de los materiales y la presencia de superficies irregulares de los elementos implicados durante la fricción. Un material sensiblemente más duro desgastará con facilidad a uno más blando, cosa difícil en sentido contrario. Mientras que las imperfecciones, aunque sean microscópicas son zonas de debilidad con una cohesión más baja que el conjunto. Como es lógico, el mundo natural no se rige por condiciones ideales, y propiedades como la dureza o la resistencia pueden rebajarse ante procesos de meteorización química, entre otros.
Tipos de erosión
Existen varios tipos de erosión, clasificados según el agente precursor detrás del movimiento de los materiales cuya fricción provocará el pulido de las litologías con las que entren en contacto. Los tipos principales incluyen:
- Erosión hídrica: causada por el agua líquida, incluyendo la lluvia, las corrientes de ríos y la escorrentía superficial. Es el tipo más común de erosión y uno de los más eficaces al tener un efecto químico en los materiales sumado a su propia capacidad erosiva.
- Erosión eólica: ocurre cuando el viento desplaza partículas sueltas de suelo o arena que impactan a gran velocidad contra las superficies puliendo sus irregularidades. Es típica en áreas secas con poca vegetación.
- Erosión glacial: producida por el movimiento de los glaciares, que, al desplazarse, arrastran rocas, puliendo la superficie terrestre y acumulando depósitos como las morrenas glaciares.
- Erosión gravitatoria: se da cuando la gravedad provoca que los materiales caigan al superar un ángulo de pendiente determinado debido a la tendencia de la naturaleza a recuperar el estado de equilibrio. Este tipo de erosión depende de las características de las rocas implicadas como ocurre en los deslizamientos de tierra.
Causas de la erosión
La erosión puede ser resultado de factores naturales y antropogénicos que aumentan la formación de irregulares y zonas de debilidad del terreno siendo estas más fáciles de devastar. Entre las causas principales que determinan su presencia e intensidad se encuentran:
- Factores climáticos: como la precipitación y la temperatura, que pueden influir en la velocidad y la intensidad de la erosión hídrica y eólica. Además, los efectos químicos presentes en el entorno potencian los fenómenos de erosión disminuyendo la resistencia de la roca.
- Características del suelo: incluyendo su composición, estructura y cobertura vegetal, que determinan su vulnerabilidad a la erosión. La vegetación estabiliza la estructura del suelo al cohesionarlo gracias a la acumulación de materia orgánica y la actividad biológica con las sucesivas cementaciones que esta provoca. Sin embargo, dependiendo del tipo de plantas el efecto puede ser más o menos acusado.
- Topografía: las áreas con pendientes pronunciadas son más susceptibles a la erosión debido a la mayor velocidad de escurrimiento del agua, la inestabilidad de la roca debido a estructuras internas y el grado de pendiente.
- Actividades humanas: como la deforestación, la agricultura no sostenible, la construcción y la minería, que pueden acelerar los procesos erosivos al abrir socavones o puntos de debilidad donde suele acelerarse la erosión.
Consecuencias de la erosión
Las implicaciones de la erosión son significativas y variadas, afectando tanto al medio ambiente como a las sociedades humanas, en aspectos como la conservación del patrimonio, etc. A continuación, se detallan algunos aspectos a considerar:
- Pérdida de suelo fértil: la erosión del suelo puede llevarse la capa superior rica en nutrientes, crucial para la agricultura y la silvicultura. Por otra parte, la erosión contribuye a devastar las rocas que darán los nutrientes necesarios para el crecimiento de la cobertura vegetal.
- Sedimentación: el material erosionado puede acumularse en ríos, embalses y océanos, alterando hábitats, afectando la calidad del agua.
- Desestabilización de estructuras: la erosión puede socavar cimientos de edificios, carreteras y puentes, representando un riesgo para la infraestructura y provocando daños significativos.
- Emisión de carbono: al erosionarse el suelo, se puede liberar carbono almacenado, contribuyendo al cambio climático.
Otras morfologías del relieve permanecen como ejemplos indudables de la erosión como son los cañones, los acantilados y valles fluviales, donde este efecto ha moldeado visiblemente el paisaje. La erosión es un factor clave en la conformación de nuestro entorno geológico, y su comprensión es esencial para el manejo sostenible de la tierra y la mitigación de sus efectos negativos.
Ahora que ya sabes qué es la erosión, no te pierdas estos artículos sobre el Ciclo de las rocas: qué es, etapas e importancia y las Rocas fungiformes: qué son y ejemplos.
Si deseas leer más artículos parecidos a Erosión: qué es y tipos, te recomendamos que entres en nuestra categoría de Geología.
- Gestión y Ambiente. 2017. Erosión hídrica, fundamentos, evaluación y representación cartográfica: una revisión con énfasis en el uso de sensores remotos y Sistema de Información Geológica. Disponible en: https://es.slideshare.net/ROMAGUSBLAD/dialneterosionhidricafundamentosevaluacionyrepresentacion6687514pdf
- Vida Rural. 2003. La importancia de la conservación del suelo frente a la erosión. Disponible en: https://www.mapa.gob.es/ministerio/pags/biblioteca/revistas/pdf_vrural/Vrural_2003_169_22_24.pdf
- Ministerio de Medio Ambiente. 2004. Interacciones entre la vegetación y la erosión hídrica. Disponible en: https://digital.csic.es/handle/10261/48695
- UNRC. 2012. Erosión Hídrica. Principios y técnicas de manejo.Disponible en: https://scholar.googleusercontent.com/scholar?q=cache:DukbUP-4uaIJ:scholar.google.com/+erosi%C3%B3n+que+es&hl=en&as_sdt=0,5