Auroras boreales: qué son, tipos, cómo se forman y dónde se ven

Las auroras boreales, también conocidas como luces del norte, son un fenómeno natural que se manifiesta como un espectáculo de luces brillantes en el cielo nocturno en las regiones polares del hemisferio norte. Su equivalente en el regiones polares del hemisferio sur se llama aurora austral. Tanto la aurora boreal como la austral, pueden denominarse aurora polar.

Ahora bien, ¿por qué se producen las auroras boreales? Se producen cuando partículas cargadas del viento solar chocan con la magnetosfera de la Tierra, una región dominada por el campo magnético terrestre. La energía liberada en estas colisiones excita a los átomos y moléculas, que luego liberan esa energía en forma de luz visible. Los diferentes colores de las auroras boreales se deben a los distintos gases atmosféricos y altitudes a las que ocurren las interacciones:

• Verde: el color más común, producido por átomos de oxígeno a unos 100 km de altura.
• Rojo: también producido por oxígeno, pero a alturas mayores de 300 km.
• Azul y violeta: producidos por moléculas de nitrógeno.

Las auroras boreales pueden exhibir una amplia gama de formas y colores, los tipos más comunes incluyen:

• Arcos: la forma más común de aurora boreal, los arcos son bandas de luz que se extienden por el cielo.
• Bandas: son bandas estrechas y paralelas de luz que se extienden de este a oeste.
• Manchas: son parches irregulares de luz que pueden aparecer en cualquier parte del cielo.
• Velos: son capas delgadas y difusas de luz que cubren todo el cielo.
• Rayos: son estructuras estrechas y en forma de rayo que se extienden hacia abajo desde el cielo.

La formación de las auroras boreales es un proceso complejo que involucra la interacción del viento solar con el campo magnético terrestre y la atmósfera. A continuación, se describe brevemente cómo ocurre este fenómeno:

• Emisión de partículas solares: el Sol emite continuamente un flujo de partículas cargadas, principalmente electrones y protones, conocido como viento solar. Durante las erupciones solares o eyecciones de masa coronal, grandes cantidades de estas partículas son expulsadas hacia el espacio.
• Interacción con la magnetosfera: cuando el viento solar llega a la Tierra, se encuentra con su campo magnético, conocido como la magnetosfera. Este campo actúa como un escudo que protege al planeta desviando la mayoría de las partículas solares. Sin embargo, algunas partículas son atrapadas y guiadas hacia las regiones polares, donde el campo magnético es mas fuerte.
• Colisión con gases atmosféricos: al penetrar en la atmósfera, las partículas solares colisionan con átomos y moléculas de gases como el oxígeno y el nitrógeno. Estas colisiones excitan a los átomos y moléculas, elevándolos a estados de energía más altos.
• Emisión de luz: los átomos y moléculas excitados eventualmente regresan a su estado de energía original, liberando el exceso de energía en forma de luz. La longitud de onda (color) de esta luz depende del tipo de gas y de la altitud de la colisión.

La forma y la intensidad de las auroras dependen de la cantidad de partículas solares y de la configuración del campo magnético terrestre. Las auroras pueden adoptar diversas formas y su movimiento puede ser lento y ondulante o rápido y parpadeante.

Las auroras boreales son visibles principalmente en las regiones polares del hemisferio norte. Los mejores lugares para observarlas incluyen el norte de Noruega, Suecia, Finlandia, Islandia, Canadá y Alaska. La ciudad de Tromsø en Noruega y el Parque Nacional de Abisko en Suecia son especialmente populares entre los cazadores de auroras.

El mejor momento para ver las auroras boreales es durante el invierno, cuando las noches son más largas y oscuras. La visibilidad es mayor entre las 10 p.m. y las 2 a.m., aunque pueden ocurrir en cualquier momento de la noche.

La actividad solar también juega un papel crucial: las auroras son más frecuentes y brillantes durante los períodos de alta actividad solar, conocidos como máximos solares, que ocurren aproximadamente cada 11 años. Durante estos períodos, las tormentas geomagnéticas provocadas por el viento solar son más intensas, aumentando las posibilidades de ver auroras.

Las auroras boreales en España

Las auroras boreales son un fenómeno raro en España debido a su latitud lejana a los polos. Sin embargo, en ocasiones excepcionales, cuando hay una fuerte tormenta geomagnética causada por una intensa actividad solar, es posible observarlas en las regiones más septentrionales del país. Tal es así que el 10 de mayo de 2024, una tormenta geomagnética de gran intensidad provocó que las auroras boreales fueran visibles en gran parte de España, incluyendo Andalucía, Aragón, Galicia, Comunidad Valenciana, Cataluña e incluso Canarias.

Observar las auroras boreales es una experiencia inolvidable. A continuación, bridaremos algunas recomendaciones para maximizar tu experiencia:

• Ubicación correcta: idealmente, viaja a lugares situados en o cerca del Círculo Polar Ártico, como el norte de Noruega, entre otros, y aléjate de las ciudades y cualquier fuente de contaminación lumínica.
• Momento adecuado: la mejor época para ver auroras boreales es durante el invierno, cuando las noches son más largas y oscuras. Las auroras suelen ser más visibles entre las 10 p.m. y las 2 a.m., aunque pueden aparecer en cualquier momento de la noche.
• Condiciones meteorológicas: las auroras son visibles solo cuando el cielo está despejado. Consulta el pronóstico del tiempo y busca noches sin nubes.
• Actividad solar: las auroras son más probables durante períodos de alta actividad solar. Revisa las alertas de tormentas geomagnéticas.
• Preparación y equipo: utiliza ropa térmica y abrigada, las temperaturas pueden ser extremas en las regiones polares. Si deseas fotografiar las auroras, lleva una cámara con ajustes manuales, un trípode y una lente de gran angular. Usa una exposición larga para capturar la luz.
• Paciencia y perseverancia: las auroras pueden ser impredecibles. Dedica varias noches a la observación y sé paciente.
• Seguridad: considera unirte a tours guiados por expertos locales que pueden llevarte a los mejores lugares de observación y proporcionarte información adicional sobre las auroras.

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