Ciclón tropical o tormenta tropical: qué es y cómo se forma

Un ciclón tropical, es un tipo de sistema meteorológico caracterizado por vientos fuertes y una intensa actividad de lluvia y tormentas eléctricas. Estos sistemas se forman sobre los océanos tropicales y se desarrollan a partir de perturbaciones atmosféricas, generalmente cuando la temperatura de la superficie del mar alcanza al menos los 26 °C y las condiciones son favorables para su desarrollo.

Vale aclarar que, aunque se utilizan los términos de ciclón tropical y tormenta tropical como sinónimo, lo cierto es que no son lo mismo. En verdad, la tormenta tropical es una etapa temprana en el desarrollo de un ciclón tropical. Se caracteriza por vientos sostenidos máximos que van desde 63 a 118 kilómetros por hora. En tanto, el ciclón tropical es un término más amplio que incluye todas las etapas de desarrollo de estos sistemas, desde depresiones tropicales hasta tormentas tropicales y huracanes.

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Para que un ciclón tropical se desarrolle, se requieren 4 condiciones:

• Aguas cálidas del mar, superiores a 26 °C.
• Vientos débiles en la atmósfera superior.
• Perturbación atmosférica, como un área de baja presión.
• La rotación de la Tierra provoca que las corrientes de aire se curven en el norte a la derecha y en el sur a la izquierda, conocido como Efecto Coriolis. En este post puedes leer acerca del Efecto Coriolis.

Cuando las 4 condiciones se dan en simultáneo, se pueden desarrollar ciclones tropicales mediante el siguiente proceso:

1. Nube de convección: la primera etapa es la formación de una nube de convección, que es una nube que se forma cuando el aire caliente y húmedo sube y se enfría. Estas nubes pueden formarse por una variedad de factores, incluyendo la inestabilidad atmosférica, la presencia de montañas o la influencia de una perturbación tropical.
2. Depresión tropical: cuando la nube de convección se intensifica y se organiza, se convierte en una depresión tropical. Las depresiones tropicales tienen vientos sostenidos de entre 31 y 62 km/h.
3. Tormenta tropical: cuando los vientos de una depresión tropical aumentan a entre 63 y 118 km/h, se convierte en una tormenta tropical. Las tormentas tropicales tienen un centro de baja presión bien definido y nubes que se extienden en forma de espiral.
4. Huracán: cuando los vientos de una tormenta tropical aumentan a más de 119 km/h, se convierte en un huracán. Los huracanes son los ciclones tropicales más intensos y pueden causar daños catastróficos. Para más información puedes leer este otro artículo sobre el Huracán.

Los ciclones tropicales se clasifican de acuerdo a su fuerza, mediante la escala Saffir-Simpson:

• Categoría 1: vientos máximos sostenidos de 119 a 153 km/h. Puede causar daños menores, como árboles caídos y daños en edificios.
• Categoría 2: vientos máximos sostenidos de 154 a 177 km/h. Los daños suelen ser moderados, incluyendo daños estructurales significativos y cortes de energía.
• Categoría 3: vientos máximos sostenidos de 178 a 209 km/h. Puede causar daños importantes en edificios y áreas costeras debido a las marejadas ciclónicas.
• Categoría 4: vientos máximos sostenidos de 210 a 249 km/h. Los daños suelen ser catastróficos, con destrucción generalizada de edificios y graves inundaciones costeras.
• Categoría 5: vientos máximos sostenidos de 250 km/h o más. Puede causar devastación total, con la destrucción de edificios, inundaciones graves y marejadas ciclónicas mortales.

Las consecuencias de un ciclón tropical depende de la intensidad con la cual se manifieste, alguna de ellas incluyen:

• Daños estructurales: las estructuras, incluyendo viviendas, edificios y puentes, pueden sufrir daños significativos debido a los vientos, las inundaciones y las marejadas ciclónicas. Los daños a la infraestructura pueden interrumpir servicios esenciales como el suministro de agua potable y la comunicación.
• Evacuación de personas: los ciclones tropicales a menudo provocan la evacuación de comunidades en riesgo debido a las amenazas de inundaciones y marejadas ciclónicas.
• Pérdida de vidas humanas: los ciclones tropicales pueden ser mortales debido a los peligros que presentan, incluyendo los vientos fuertes, las inundaciones y las marejadas ciclónicas. Se pierden vidas humanas y de muchas otras especies animales.
• Destrucción de cosechas y recursos naturales: las lluvias intensas pueden dañar los cultivos y provocar la erosión del suelo. Además, los vientos fuertes pueden derribar árboles y dañar la vegetación, lo que afecta a la agricultura y la biodiversidad local.
• Impacto económico: los ciclones tropicales pueden tener un impacto económico significativo al dañar la infraestructura, interrumpir la producción y afectar las industrias clave, como la pesca y el turismo.

Tras haber leído sobre qué son los ciclones tropicales, te animamos a la lectura de estos otros artículos de GEOenciclopedia sobre la DANA o gota fría: qué es, cómo se forma y consecuencias y el Tornado.

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