Los Desastres Naturales

Movimientos de la Tierra

Por Equipo de redacción. 11 enero 2023
Movimientos de la Tierra

No se siente, pero sucede. El planeta Tierra está en continuo movimiento y nunca ha dejado de hacerlo. Las personas pueden no estar conscientes de esto, puesto que al observar el cielo en la noche las estrellas y la luna parecen estar fijas en su ubicación y nadie siente que esté moviéndose bajo sus pies. Sin embargo, ¿no es cierto que existen 4 estaciones y las condiciones de la naturaleza cambian conforme pasa un año? No todo el tiempo suele sentirse tanto frío como en invierno o tanto calor como en verano.

En efecto, la Tierra se mueve de tal manera que gira sobre su propio eje y alrededor del Sol. Estos dos movimientos principales son la rotación y la traslación, y ambos están directamente relacionados con varios fenómenos.

Índice

  1. ¡La Tierra no está quieta!
  2. Rotación de la tierra
  3. Traslación de la tierra

¡La Tierra no está quieta!

En la antigüedad, los hombres se dieron cuenta de que los astros parecían moverse y comenzaron a intentar explicarse la razón. La curiosidad favoreció los avances científicos y paulatinamente se llegó a la conclusión de que el planeta gira alrededor de la estrella central, el Sol, y alrededor de sí mismo. Al griego Filolao, es a quien se atribuye la idea de que la Tierra no es el centro del Universo.

En la Antigua Grecia, los filósofos tenían diversas ideas sobre la razón del movimiento de los cuerpos celestes. Como precedente de la idea de rotación, los pitagóricos (seguidores de la escuela de Pitágoras) estaban convencidos de que era la Tierra la que giraba y no los cielos. Uno de ellos, llamado Filolao, es a quien se atribuye la idea de que la Tierra no es el centro del Universo. De acuerdo con él, los planetas, el Sol, la Luna, las estrellas y el planeta se movían alrededor de un cuerpo astronómico hipotético, un fuego central.

Aristóteles pensaba que tanto los planetas como el Sol se movían en torno a la Tierra; esta fue la idea que predominó hasta muchos siglos después cuando Nicolás Copérnico adoptó e hizo famosa la teoría heliocéntrica, en la que describe un Sistema Solar basado en la órbita de los planetas, las estrellas y demás cuerpos celestes alrededor del Sol.

Galileo Galilei, Johannes Kepler e Isaac Newton, entre otros eruditos, mostraron evidencias científicas de las aseveraciones de Copérnico. La tecnología de los telescopios permitió la observación más precisa del cielo, y tanto la traslación como la rotación se convirtieron en ideas confirmadas.

Rotación de la tierra

El eje de la Tierra es un polo o línea imaginaria que atraviesa el planeta de arriba abajo o del Polo Norte al Polo Sur. El movimiento de rotación se define como aquel en el que la Tierra “rota” o gira sobre este mismo eje cada 24 horas con respecto al Sol, por lo que a este período se le llama “día solar”. Con respecto a las estrellas fijas, el planeta gira cada 23 horas, 56 minutos y 4 segundos y se le llama día sidéreo o sideral.

Un punto importante a saber es que la Tierra no se sitúa de forma vertical, como si estuviera colocada en una superficie con el Polo Sur como base. El eje terrestre está inclinado unos 23.5 grados y esto ocasiona que existan las estaciones del año. La dirección que sigue el movimiento es de oeste a este, como en el caso de otros planetas del Sistema Solar, por lo que una parte de la superficie del planeta recibe directamente los rayos solares mientras la otra no. Esto es lo que origina el día y la noche. La Tierra no se sitúa de forma vertical; su eje está inclinado ocasiona que existan las estaciones del año.

Aunque la rotación es un movimiento permanente, ha variado ligeramente durante el transcurso de la historia. Hace muchos años los días eran ligeramente más cortos. En realidad, la verdadera duración de los días solares depende de la inclinación de la órbita terrestre así como de otros parámetros matemáticos. En consecuencia, un día solar puede ser más largo o más corto según el punto donde se encuentra con respecto al Sol. Los días solares suelen ser más largos cuando la Tierra se halla cerca de su perihelio, que es el punto en el que el planeta se halla más cerca del Sol.

Traslación de la tierra

Así como el planeta gira sobre sí mismo, gira alrededor del Sol. El movimiento de traslación se produce a partir del trazo de una órbita elíptica completa en torno al astro rey, órbita que tiene una duración de 365 256 363 004 días. Todo ese tiempo corresponde a un año sideral. Las horas restantes se acumulan cada año y en un período de 4 años completan 1 día entero, que se añade en el calendario al mes de febrero. El año que contiene 1 día más, es decir, 366 días en el calendario gregoriano (el calendario comúnmente usado), es un año bisiesto.

Toma a la Tierra una velocidad orbital de aproximadamente 30 kilómetros sobre segundo (29.8 km/s) completar su órbita heliocéntrica a una distancia media del Sol de aproximadamente 150 millones de kilómetros. La trayectoria que sigue es elíptica, es decir, no es completamente redonda, y tiene alrededor de 940 millones de kilómetros (939, 887,974 km).

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