Mitos de la Luna

Mitos de la Luna

Desde que los primeros seres humanos se percataron de la presencia de la Luna, surgieron numerosas historias en torno a ella; pero no fue hasta los inicios del lenguaje cuando pudieron plasmar lo que para ellos representaba.

En todas las culturas, la Luna ha tenido una valiosa presencia. Su aparición en vasijas, calendarios, joyas, tumbas, grabados, pinturas rupestres y demás objetos, refleja la importancia que los pueblos de las civilizaciones más avanzadas le conferían.

Las fases de la Luna jugaron un papel importante en la percepción que se tenía sobre ella. Asimismo, se creía que servía como medio de conexión entre los dioses y los humanos, pues fenómenos como los eclipses eran considerados mensajes enviados por las deidades.

Gracias a las fases, a los movimientos, a su cambiante coloración, a su tamaño o distancia y a la construcción perceptiva a partir de un entorno, la Luna es la protagonista de numerosas mitologías y leyendas populares que prevalecen hasta nuestros días, sin importar con qué herramientas tecnológicas y avances científicos cuenta ahora la humanidad. Lo que es parte de la cultura ancestral, siempre se respetará.

La luna llena atrae a los lobos.

En nuestra cultura siempre ha existido una relación entre la luna llena y el aullido de los lobos. Si bien, sabemos que los hombres lobos son parte de cuentos de terror y un ser humano no puede convertirse en estos cánidos a la luz de la luna, sí se cree que cuando hay plenilunio los lobos suelen sentirse inquietos y atraídos, aumentando los aullidos hacia el cuerpo celeste.

Realmente estos mamíferos carnívoros no le aúllan a la luna. Los aullidos son producidos en cualquier momento como forma de comunicación entre las manadas. Los aullidos informan ubicación en caso de que algún miembro esté perdido, o, para informar a otras manadas sobre su territorialidad. También sirven para llamados y señales de éxito en la cacería. Existen varios tipos de aullidos de acuerdo a la situación y la luna solo es parte del escenario boscoso y oscuro.

Los ciclos de la mujer.

Se dice que una mujer tiene más posibilidades de quedar embarazada cuando la luna está en plenilunio o en fase llena porque está en su mejor momento físico y emocional.

De igual manera, se cree que la llegada de la menstruación va de la mano con dicha fase lunar. Esto último no se da de forma mágica, sino que considerando que la regla se da cada 28 días y el ciclo lunar demora 29.53, es posible que un 20% de las mujeres esté menstruando durante una luna en dicha fase.

La luna es de queso.

Actualmente nadie cree en esto, más que los niños muy pequeños. No obstante, años atrás, esta declaración creaba duda sobre su veracidad, debido a que la luna es redonda, blanca y posee varias marcas circulares tal y como los quesos. Con los años, las explicaciones sobre los cráteres fueron revelando la verdad. Sin embargo, a algunos niños en edad preescolar se les continúa asegurando que la luna es de queso como forma de estimular su imaginación y creatividad.

La luna y las enfermedades.

Para algunos, la luna llena tiene efectos negativos hacia la salud. Años atrás, estas afirmaciones tenían un fuerte impacto hacia la población porque se explicaban con un ejemplo real: así como el mar se alborota por la gravedad de la luna, nuestro cuerpo, al contener agua, también sufre cambios y alteraciones. Sin duda, es un dato falso que científicamente no es posible.

Una enfermedad en particular que fue mucho tiempo relacionada con la luna llena, es la epilepsia. Incluso, se le llegó a llamar “mal lunar”. La explicación puede ser un tanto absurda para nuestros días, pero para tiempos de poca tecnología y avance en la medicina, era algo abrumador. El mito decía que la Luna tenía la capacidad de calentar la atmósfera, a tal grado que podía derretir el cerebro de algunas personas provocando ataques.

La ropa lavada luce más blanca.

En algunas zonas rurales, existe la creencia de que colgando la ropa recién lavada durante la noche, a la mañana siguiente se obtendrán prendas mucho más blancas de lo normal debido a la luna llena, que de alguna manera “imprime” su blancura hacia la ropa blanca.

La ciencia explica que cuando la luna llena luce muy grande y nítida, es señal de que la atmósfera está despejada. Tal condición permite que una mayor cantidad de gotas de aire húmedo se condensen y se impregnen en los cuerpos; en este caso, la ropa. Estas gotas conocidas como ‘rocío’, contienen una sustancia oxidante que proporciona un blanco más intenso.

La Luna y el crecimiento del cabello.

Las creencias dicen que si se desea que el cabello crezca más rápido, se corte entre la luna nueva y luna llena, es decir, en la fase creciente. Pero si se intenta lograr lo contrario, o sea, que el crecimiento sea más lento, el corte se debe realizar durante la fase menguante, que es lo mismo entre la luna llena y la luna nueva.

Este mito proviene de la creencia que la Luna es símbolo de regeneración. Aunado a eso, se recomienda que cualquier tratamiento de cuidado también se lleve a cabo en luna creciente.

El fase menguante, se recomienda realizar cambios de color en el cabello, así como tratamientos en la piel corporal.

Esto no tiene ningún sustento científico, pero muchas mujeres aseguran que los resultados sí concuerdan con las fases de la Luna.

Es aliada de los hechizos.

Existen numerosos hechizos que solamente “surgen efecto” con ayuda de la energía lunar. Mucha gente se dedica a esto porque evidentemente, son muchos los que creen en el poder de este cuerpo celeste para atraer, unir y fortalecer energías humanas.

La petición más “solicitada” es la del hechizo para atraer un nuevo amor. Con solo una vela, un plato, alguna infusión de una hierba aromática y la luz de la Luna, puede lograrse un efecto, según los que realizan este tipo de prácticas. Claro, que para ello se deben seguir instrucciones precisas y hacer buen uso de los ingredientes solicitados.

La segunda petición es la de obtener estabilidad económica. Ahí las velas de colores son indispensables, al igual que el azúcar y por supuesto, la energía de la luna llena. Todos los deseos deben ser “ofrecidos” a la luna para que esta haga su trabajo.

También es muy común escuchar que la energía lunar sirve para cargar amuletos, piedras preciosas y agua, colocándolos frente a una ventana durante la noche. Esto otorgará nueva energía para nuevos comienzos.

Este tipo de prácticas aún se llevan a cabo, aún cuando la ciencia ha afirmado que todo esto no tiene ningún sustento comprobado.

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